Disponer de un dormitorio extra en casa es hoy en día un pequeño lujo del que disponen solo algunos hogares. Si tú también tienes una habitación que te sobra y quieres aprovecharla al máximo, no dudes en preparar el mejor dormitorio de invitados. ¡Tus visitas quedarán encantadas cada vez que se queden en tu casa!
Hoy nos centramos en el arte de recibir invitados en casa, preparando una habitación a su medida. Casi como si de un hotel de lujo se tratada, no hay nada mejor que dormir en el hogar para sentirse plenamente acogidos.
Ya sea para recibir amigos, a tus padres, tus hijos, familiares, o incluso para sorprender a cualquier persona que necesite alojamiento un par de noches, te enseñamos cómo preparar su habitación. Con todos los detalles necesarios, y aprovechando al máximo hasta el último rincón del cuarto de invitados. ¡Ponte manos a la obra!
Cómo decorar una habitación de invitados
Cama para un cuarto de invitados
Empezamos por el punto más importante: la elección de la cama para la habitación de invitados. Lo ideal sería elegir una cama grande, lo más amplia posible para que se sientan cómodos, tanto si la visita consiste en una, dos o más personas.
Elige una estructura de cama que sea sencilla, cómoda y bonita. No tienes que invertir en una gran cama, ya que se usará de manera esporádica. Eso sí, es importante que el colchón sea de buena calidad, garantizando un sueño reparador a los durmientes.
Sin embargo, si tienes una habitación pequeña, y no te cabe una gran cama, no te preocupes, puedes recurrir a otras alternativas. Las camas plegables, los divanes extraíbles, cama nido, e incluso las camas literas o tipo tren te permitirán aprovechar mejor el espacio.
Convierte en una habitación multiusos ese cuarto de invitados que apena se emplea una vez al mes. Puedes adaptarla para usarla como despacho, como zona de lectura, o también como zona de almacenaje extra. Combina una cómoda cama con el resto de elementos que necesites en la habitación.
Otra alternativa para que el dormitorio pueda usarse por ejemplo como despacho, sería poner un cómodo sofá cama. Tan solo tendrás que abrirlo cuando vengan invitados, o en el caso de que necesites alojar a más gente en casa, combinándolo dentro del mismo dormitorio con una cama extra.
Decoración minimalista y neutra
En la decoración de habitación de invitados, todos los expertos en interiorismo coinciden en lo mismo: menos es más. Recurre a una decoración lo más neutra posible, principalmente porque lo tendrás mucho más fácil para mantener el espacio limpio y ordenado.
La decoración minimalista también transmite sensación de serenidad a las personas que ocuparán la habitación de manera temporal. En las habitaciones de invitados, los muebles de color blanco o en tonos madera clara son los mejores.
Nunca está de más que le pongas un toque personal, como algún pequeño cuadro u objeto decorativo. Pero ten en cuenta que tus gustos decorativos no tienen por qué ser como los de los demás. Para que sea del agrado de todos, elige detalles sencillos.
Si no tienes claro cómo decorar una habitación de invitados, piensa en lo que más te gusta a ti cuando vas a un hotel. Seguro que agradeces una habitación espaciosa, luminosa, y sin detalles estrafalarios. Justo esto es lo que tenemos que conseguir.
Lo que mejor funciona son unas paredes en color blanco o tonos claros, una ventana por donde entre buena luz natural, combinando unas cortinas básicas que aporten intimidad y deje pasar la luz. Añade otros puntos de luz a través de lámparas de techo, apliques en las paredes y lámparas de pie o sobremesa, que serán de gran utilidad por la noche.
Textiles para la habitación de invitados
A veces las habitaciones decoradas de manera muy sencilla y con colores muy claros puedes resultar extremadamente frías. No te preocupes, la solución la tienes en el uso de los textiles de hogar adecuados. Hay muchos que puedes usar para decorar un cuarto.
En habitaciones de invitados pequeñas, cuando no se puede añadir muchas cosas, los textiles son piezas clave en la decoración. Basta con poner algunos cojines con personalidad, unas cortinas y hacer una buena elección de la ropa de cama, para conseguir un resultado increíble.
Los mejores materiales para dormitorios de invitados son los naturales, como el algodón, el lino o la lana natural. Dan ese toque acogedor que nos hace sentir como en casa, con una sensación de lujo sin tener que hacer una inversión demasiado elevada.
Para que sea fácil de lavar, la ropa de cama blanca de algodón te resultará muy práctica. Combínala con unos cojines estampados o con un color bonito, y el cuarto de invitados quedará perfecto.
Con una bonita alfombra y una manta a los pies de la cama, es más que suficiente. Si además tienes un sofá o un sillón en la habitación, puedes poner cojines o almohadones a juego. Lo más importante es que el dormitorio de invitados sea agradable a la vista y sobre todo al tacto.
Espacio para guardar sus cosas
La habitación de invitados apenas se ocupará durante unos días, mientras la visita esté en casa. Seguro que traerán su equipaje, y quizás necesiten colgar o extender algunas prendas de ropa. No dudes en darles los accesorios correctos para ello.
En muchas habitaciones extra que se usan como dormitorio de invitado o cuartos de estar suele haber armarios empotrados o roperos. Lo más normal es que se use como almacenaje para la familia, y no siempre queda espacio para que los invitados pongan su ropa.
No te preocupes, porque tampoco necesitarán mucho espacio para ellos. Junto a la cama para invitados, puedes poner un pequeño armario abierto o cerrado, de uso ocasional. También puede ser de gran ayuda un perchero o burro. Con algunas perchas tendrán el sitio ideal para colgar chaquetas, vestidos, camisas y otras prendas.
Otra de las cosas para una habitación de invitados que vienen muy bien son las cómodas para la ropa. Tampoco tiene que ser muy grande. Con algunas baldas o cajones será suficiente para que puedan deshacer la maleta y colocar todo a mano.
Si no hay mucho espacio, puedes recurrir a unos cestos, una barra-colgador, o como mínimo una banqueta para colocar la maleta. Con este sencillo gesto, el dormitorio de invitados se transformará en la habitación de hotel más cómoda de la ciudad.
Perfume y ambientador para el dormitorio
En la decoración de cuarto de invitados, algo que tampoco debe faltar es una buena ambientación con un olor increíble. Elige un perfume agradable y suave, que sea del gusto de cualquier persona, y será un acierto asegurado.
A la hora de preparar el dormitorio, haz primero una limpieza profunda y abre las ventanas para una buena ventilación. Cambia las sábanas por unas recién lavadas, escogiendo un suavizante fresco que ambiente todo el cuarto.
Si quieres que dure más el aroma, puedes ayudarte de un perfumador de tejidos en formato spray líquido o en bruma. Pon un poco de producto sobre las sábanas de toda la cama, e incide en las almohadas. ¡Pero sin pasarte!
La bruma se puede poner en todos los textiles, como las cortinas, cojines y mantas. También añade un ambientador en tu formato favorito, ya sea eléctrico, en difusor, estilo mikado, un difusor de aceites, o incluso un ambientador en bolsitas.
Los aromas suaves a flores son los mejores. La lavanda es altamente relajante para un dormitorio, también la bergamota, la camomila, el sándalo o la rosa. Un poquito más intenso es el incienso, que puedes poner en forma de varillas, quemándolo justo antes de la llegada de los invitados para que el cuarto huela bien.
Flores, plantas y velas
El toque final de decoración se lo daremos con elementos naturales que tienen una función extra. Nos referimos sin duda a las flores y las plantas naturales, que le darán ese toque fresco a la estancia, además de mucha personalidad.
Si tienes espacio suficiente, no dudes en poner una planta de gran tamaño. Las plantas tipo palmeras son las más bonitas para decorar un dormitorio. También plantas colgantes como potos, que refrescan el ambiente y eliminan las impurezas de forma natural.
Unas flores frescas en un jarrón sobre la mesita de noche o la cómoda le dará la mejor bienvenida a tus invitados. Elige flores de temporada, realizando tú mismo un ramo a medida que no tendrá que ser demasiado grande.
Otra alternativa son las macetas pequeñas, con plantas resistentes de interior. Puedes elegir desde una suculenta o cactus, hasta una planta mucho más exótica como una orquídea. Son muy elegantes y quedan especialmente bonitas en el dormitorio.
Las plantas y flores dan muy buen olor al dormitorio. Lo mismo puedes conseguir con unas velas aromáticas que huelan a flores. Sin necesidad de encenderlas, las velas ya de por sí aromatizan el ambiente. Las puedes encontrar en formatos preciosos que resultan muy decorativos.
Amenities como en un hotel
No nos olvidamos de otros pequeños detalles para la habitación de invitados que marcan la diferencia. Uno de los más importantes: las toallas de baño. Elige un bonito juego de toallas para que cada invitado se pueda duchar y asear durante su estancia.
Si quieres ir un poquito más allá, no dudes en dejar a mano las típicas amenidades que hay en los hoteles. Un cepillo de dientes, dentífrico, gel de baño, champú, e incluso una loción corporal y otros productos que puedan necesitar. Adelántate antes de que te los pidan.
Por ejemplo, puedes colocar un bonito cesto con todos estos detalles en la habitación. Pon las toallas en la parte inferior del cesto, y sobre ellas, los productos de baño individuales. ¡La sorpresa les encantará!
Un anfitrión aún más detallista no se olvida de tener siempre a mano unas zapatillas, quizás una bata para estar por casa, y un pijama. Puede parecerte demasiado; pero si sueles tener muchas visitas en casa, ten por seguro que algún invitado acabará por usarlo.
El siguiente nivel sería colocar algunas bebidas de cortesía en la habitación, para que se tomen algo mientras deshacen la maleta. Una jarra con agua y unos vasos son altamente prácticos, sobre todo para alguien que no está en su casa y no sabe llegar a la cocina para beber en mitad de la noche cuando tenga sed.
Detalles personalizados
Nadie mejor que tú conoce cuáles son los gustos de los familiares y amigos que vienen a visitarte. Seguro que en ningún hotel tendrían detalles como los que puedes hacer tú por ellos, de una manera sencilla pero conmovedora.
Es tan fácil como colocar un pequeño bol sobre la mesita de noche con algunos de sus caramelos o regalices favoritos. Quizás un libro o un cómic para leer un poco antes de ir a dormir, o hacer una sopa de letras o sudoku como terapia de relajación.
Puedes dejarle un equipo de música con sus discos predilectos, o un altavoz que pueda conectar al móvil y escuchar canciones o un podcasts. Tampoco es habitual que haya televisión en el dormitorio de invitados; por lo que puede ser un gesto que marque la diferencia.
Y si quieres simplemente tener un detalle enternecedor, escríbele una nota de bienvenida. Coméntale la alegría que te da recibirle en casa con unas simples palabras. ¡Ah, y no te olvides de dejarle junto a la nota la contraseña del wi-fi! Esto también es de agradecer.
En definitiva, el dormitorio de invitados puede ser un gran paraíso para aquellas personas que lo ocuparán durante algunos días, convirtiéndote en el anfitrión o anfitriona perfecto. Pasa de un cuarto desordenado a una habitación de hotel súper lujosa con estos sencillos consejos.
Más ideas para decorar el dormitorio
Los consejos para la decoración de un dormitorio de invitados no terminan aquí. En el blog Decorar con Gusto encontrarás otras muchas recomendaciones de la mano de los expertos en interiorismo para sacarle el máximo partido a ese dormitorio extra que tienes en tu casa. Echa un vistazo a estas otras publicaciones:
- Cómo decorar dormitorios blancos
- Decoración de dormitorios nórdicos
- Ideas de camas abatibles para dormitorios pequeños
- Consejos para poner la cama debajo de la ventana
- Ideas para pintar paredes de dormitorios
Desde la elección de las camas para invitados, pasando por los detalles más pequeños y personalizados, todo cuenta para convertir esta estancia en el cuarto perfecto. No dudes en ofrecer lo mejor a tus seres queridos con un dormitorio de invitados cuidadosamente preparado para ellos.