No hay mejor forma de disfrutar de una cocina que tener todos los alimentos bien ordenados y en su sitio. Hoy en día existen múltiples trucos para organizar una despensa que nos indican cómo colocar cada producto, facilitándonos mucho la vida en nuestro día a día.
Incluso si tienes una despensa muy pequeña, tú también podrás ordenarla adecuadamente. Estos tips se adaptan a todos los espacios, dimensiones y necesidades, ya que no es lo mismo la cantidad de alimentos para una familia numerosa que para una pareja o una persona que viva sola.
Pero, ¿cómo puedo organizar una despensa para disfrutar del orden y la funcionalidad en esta parte de la casa? Toma nota de estos consejos básicos que nos dan los expertos en orden en el hogar para que los adaptes fácilmente. Conseguirás una despensa organizada de la que estarás muy, pero que muy orgulloso.
Consejos para organizar una despensa funcional
Divide por tipo de comida
No hay dos tipos de despensa de cocina iguales, ya que en cada vivienda se guardan los alimentos no perecederos donde buenamente quepan. Hay familias que tienen suerte de disponer de un gran armario en el que incluso se puede caminar dentro, y otras que tienen varios pequeños armarios distribuidos por toda la cocina.
No te preocupes, porque sea como sea tu despensa o el espacio de almacenamiento de tu cocina, podrás organizarla para que te quepa todo lo que necesitas. ¿Cómo empezamos el trabajo? Lo primero es hacer limpieza profunda.
Vacía todos los armarios, estantes y cajones, y agrupa los alimentos de despensa por tipo. Por ejemplo, divide las legumbres crudas y cocidas, arroces y pastas, frutos secos, galletas y cereales, latas de conserva, o bebidas que no necesitan refrigeración, separándolos debidamente.
Encuentra un lugar adecuada para cada uno de ellos, colocándolos por grupos de alimentos para que sepas en todo momento dónde encontrar el producto concreto cuando lo necesites para cocinar.
Es importante que tengas a mano los alimentos a los que más usos le des, como puede ser el azúcar, la harina, el aceite o las especias. Así no tendrás que revolver todo para sacarlo.
Pon en la parte superior e inferior los alimentos de uso esporádico, y en las baldas que quedan a la altura de los ojos, o cajones superiores, los productos que mejor te vengan para cocinar.
Limita la cantidad de productos
Aunque a veces nos pasamos comprando más cantidad de un alimento, porque haya una promoción u oferta en el supermercado, o porque nos hemos equivocado y adquirido de más, lo más recomendable es controlar lo que tenemos para evitar excedentes.
El espacio en la despensa es limitado, y por ello no sirve de nada tener mucho de algunas cosas y que luego no quepa lo demás. A la hora de organizar la despensa, la cantidad de alimentos es primordial.
Si hay alimentos que suelas consumir mucho, o que gastes en grandes cantidades, la recomendación es que tengas un paquete abierto y otro por estrenar. No necesitas más.
Por ejemplo, puedes tener harina, tus frutos secos favoritos, cereales de desayuno, y otros alimentos que precisen de una reposición casi diaria porque en casa los tomáis con frecuencia.
¿Qué puedes hacer si tienes excedente de alguno? Busca otros sitios donde almacenarlos, como por ejemplo el trastero de casa, la bodega, el garaje o un armario auxiliar para tus alimentos.
Procura no pasarte comprando de más, ya que al final corres el riesgo de que se te caduquen los alimentos y tengas que tirarlos. En la organización de tu despensa perfecta no hay lugar para los excesos.
Botes transparentes para alimentos
Una de las mejores ideas de despensas para cocinar que se ha vuelto viral en los últimos años es el uso de botes transparentes. No solo es más práctico para tener a mano, si no que también sirven para decorar con un aire más vintage.
¿Qué tipo de productos puedes poner en botes transparentes? Alimentos secos como legumbres, pasta, arroz, harina, azúcar, cereales, frutos secos o semillas, entre otros.
Es importante que sean alimentos no perecederos, o que al menos, los botes sean herméticos y se pueden almacenar correctamente. En este caso, los mejores son los botes de cristal.
Igualmente puedes usar recipientes plásticos que faciliten el almacenaje, como aquellos que tienen forma cuadrada o rectangular, y se pueden apilar mejor. En vez de tener los botes originales de los alimentos abiertos, ganarás espacio si los conservas todos en los mismos envases.
Para que no te líes a la hora de usarlos, no te olvides de ponerles etiquetas con el nombre del alimento que conserva en su interior. De todas formas, al ser transparentes es más fácil ver qué contienen.
En estantes, un mueble de cocina o despensas abiertas, el uso de botes de vidrio para alimentos queda muy bonito, y pueden ser accesorios decorativos de lo más originales si buscas un diseño bonito y práctico.
Ordena por fecha de caducidad
Por muy ordenada que esté la despensa, es inevitable que a veces se quede un alimento olvidado al fondo y acabe por caducar. No dejes que esto te pase, y controla en todo momento la fecha de vencimiento.
Una muy buena opción es colocar los productos siempre por fecha de caducidad, poniendo delante o encima los que tengan menor periodo de tiempo. Cuando vayas a comprar uno nuevo, ponlo detrás del anterior, y lo consumirás antes.
Este truco es efectivo para los productos que vienen en su propio envase, como latas, conservas en bote de vidrio, líquidos y otros. Para los alimentos que pongas en botes transparentes u otros envases, no te olvides de anotar la fecha de caducidad en una etiqueta.
Es importante que cuando rellenes los botes de la despensa, gastes completamente el alimento que hay en cada uno, y lo limpies antes de poner el nuevo. Igualmente puedes retirar el alimento antiguo, rellenarlo, y poner por encima el contenido anterior para gastar en primer lugar.
Emplea tu propio sistema organizador mirando la fecha de caducidad en todo momento. En toda despensa funcional debe hacer una correcta rotación de productos para que no venzan.
Si tienes una despensa profunda o muebles bajos, revísalos de vez en cuando para que no quede ningún alimento o bebida olvidado. Aprovecha para limpiar a fondo y tener la despensa impecable.
Cajas y cestas para ordenar la despensa
Otra de las mejores ideas para organizar una despensa de cocina es utilizar cajas, cestas y diversos elementos organizadores. En tiendas como Ikea o Leroy Merlin encontrarás muchos accesorios que te lo pondrá súper fácil en la organización de tu hogar.
Elige cestas de mimbre o de tela con un diseño bonito para las baldas abiertas. De esta manera, los alimentos quedarán separados y ordenados, retirándolos de la vista para conseguir un resultado homogéneo.
Para coger cada alimento solo tendrás que mover la cesta y tendrás más fácil acceso, incluso para aquellas que están en la parte de arriba de la alacena.
Las cajitas de plástico transparente y separados son muy útiles para organizar los cajones y las cestas, dividiendo los productos por tipo. Los encontrarás de muchos materiales, colores y tamaños, para adaptarlos a tus necesidades.
Las cajas de madera son ideales para poner la fruta y las hortalizas en la despensa, manteniéndolas en condiciones idóneas para que estén siempre frescas. Hazte con diseños bonitos, o pinta tú mismo unas cajas de madera.
Gracias a este sistema de almacenaje podrás colocar productos en vertical, aprovechando hasta el último centímetro de espacio. Hazte con cajas apilables y te serán muy útiles.
Cajones con guía
Los cajones con guía se han convertido en un imprescindible en los muebles de almacenaje del hogar. Hacen más accesible los huecos profundos de la despensa, permitiendo que llegues hasta el fondo sin esfuerzo.
Vienen genial para los espacios más inaccesibles, como muebles bajo o si tienes una despensa bajo escalera. No tendrás que agacharte demasiado, adaptando aquellos huecos que no tienen cajones y que suelen quedar inservibles.
Los puedes encontrar en muchos tamaño y diseños diferentes, según el tipo de mueble o estante donde los coloques. Los más sencillos son cajones cuadrados o rectangulares, que vienen con una guía debajo para pegar sobre una superficie fija.
También puedes poner en tu despensa sistemas extraibles en forma de semicírculo o bandejas giratorias. Gracias a estos herrajes aprovecharás mejor los muebles de tu cocina o despensa.
Elige tipo bandeja o grandes cestos según el producto o los alimentos que vayas a colocar. Ten en cuenta la resistencia para saber cuánto peso aguantará sin que deje de funcionar correctamente.
Cajones telescópicos, bandejas oscilantes, cestos extraibles para muebles bajos, y un largo etcétera. Tienes muchos sistema a tu disposición para encontrar uno a tu medida.
Accesorios para aprovechar el espacio
¿Qué otros accesorios puedes incluir para organizar una despensa pequeña por poco dinero? Los hay de muchos tipos, e incluso a algunos le puedes dar tu propia utilidad, customizando su función para tu despensa.
Un ejemplo de ello son los colgadores o ganchos para las puertas, en los que puedes colgar bolsas y sacos de malla para colocar hortalizas y verduras.
También estantes adicionales que doblan el espacio de una balda, permitiéndote colocar más objetos y productos a doble altura.
Los estantes que se colocan bajo una balda tipo clip son otro de los típicos para muebles de cocina, de baño, despensas y armarios. Elige los de tamaño grande para tu hogar.
Los típicos carritos de cocina con ruedas son ideales para tener en la despensa y sacarlo cuando te haga falta. Coloca en ellos los ingredientes de uso diario, y tendrás a mano lo que necesites si vas a cocinar.
Bandejas o tablas giratorias para alcanzar mejor los productos del fondo, barras para colgar en la pared cestas y otros recipientes, sin olvidarnos de una práctica escalera para despensa o escalón para llegar a los estantes de más arriba.
Lista de la compra siempre a mano
Por mucho que te esfuerces en organizar una despensa, hay otros detalles muy importante a tener en cuenta si quieres que tus alimentos se mantengan en perfectas condiciones. Vamos a ver cuáles son.
Empezamos por el principal: tener un cuaderno a mano en el que hacer la lista de la compra. Cuando se acabe o vaya a terminarse algún producto, podrás apuntarlo inmediatamente para comprar.
Es muy importante que la despensa tenga buena ventilación, para lo cual puedes añadir un respiradero, y si es posible, también un ventilador pequeño. Añade luz para poder ver mejor si fuera necesario.
Ocúpate de medir la temperatura y la humedad, para que los alimentos estén en las mejores condiciones, evitando así que les salga moho, o que crezcan plagas de moscas, gusanos o pequeños escarabajos de la harina.
Para esto, puedes instalar un aparato que haga de higrómetro y termómetro, controlando ambas condiciones ambientales, temperatura y grado de humedad. Son aparatos sencillos, muy baratos, pero altamente útiles. Y no solo en la despensa, si no también en otras zonas de la casa.
Como puedes ver, organizar la despensa es todo un arte, pero realmente sencillo y factible cuando te pones a ello. Disfruta más de tu cocina con todos los alimentos y bebidas convenientemente ordenados, y presume de tener una ‘pantry’ con la de las películas americanas.
Otros tips para mantener el orden en tu hogar
La falta de espacio no tiene por qué convertirse en un problema para tener tu hogar siempre en orden. Descubre otros muchos consejos para optimizar al máximo el espacio en tu vivienda a través de estas otras publicaciones que encontrarás en el blog Decorar con Gusto:
- Cómo organizar un armario pequeño con mucha ropa
- Organizar un trastero pequeño y aprovechar el espacio
- Ideas para decorar el recibidor de una casa
- Cómo decorar una sala de estar pequeña
- Ideas de burros para colgar la ropa
¿Y tú, ya sabes qué consejos para organizar una despensa vas a poner en práctica? Según la disposición y el espacio, podrás aprovechar al máximo cada rincón de tu casa para tener todos tus alimentos y bebidas siempre ordenados.
